La presente investigación demuestra cómo las diferentes reformas energéticas que se han implementado en México, al vincular gradualmente los precios de los combustibles domésticos a los del mercado internacional y a la estructura tributaria interna, han tendido a distorsionar el precio y la producción doméstica de gasolinas, lo cual ha llevado a descapitalizar Pemex, a reducir la capacidad de refinación doméstica y a incrementar aceleradamente el monto de importaciones de gasolinas. El trabajo se divide en cuatro secciones. La primera analiza la evolución tanto de la organización como del modelo de negocios de Pemex, en el que actualmente predominan los criterios de eficiencia económica, apertura y dependencia creciente de capitales privados. La segunda estudia los precios interorganismos y los factores que han generado distorsiones en los componentes de éstos. La tercera está dedicada al análisis de los componentes más importantes de la balanza comercial petrolera del país, y, a partir de éste, se construyen dos estimaciones con modelos econométricos de los cambios en las elasticidades ingreso y precio de la demanda de importaciones de petrolíferos. La cuarta sección presenta las reflexiones finales con el objetivo de plantear alternativas de política energética aplicables a la realidad que enfrenta el país.