En este estudio se determinaron los efectos de un programa de ejercicio multicomponente individualizado de 4 semanas (Vivifrail) sobre la fragilidad física y la discapacidad funcional en adultos mayores que viven en hogares de ancianos. Catorce personas institucionalizadas (edad 81,7 ± 9,7 años) se ofrecieron voluntarios para completar 4 semanas del programa de ejercicio individualizado Vivifrail (5 días a la semana) de acuerdo con su nivel inicial: A, discapacidad; B, fragilidad; C, pre-fragilidad y D, robusto. Los entrenamientos fueron dirigidos por educadores físico-deportivos titulados. Once participantes completaron las 4 semanas con niveles muy altos de asistencia (96%). La capacidad funcional (puntuación del SPPB) mejoró en todos los participantes (+46,6%, p < 0,001, ES = 0,79) y tests: levantarse de la silla (45,6% faster, p = 0,003, ES = 1,43), velocidad de marcha 4 m (19,3% faster, p = 0,033, ES = 0,38) y test Timed Up-and-Go (23,2% faster, p = 0,004, ES = 0,35). La discapacidad y sarcopenia disminuyeron significativamente (SARC-F, p = 0,026, ES = 0,59; Lawton index, p = 0,013, ES = 0,87). Las personas que empezaron con niveles de discapacidad (A), fragilidad (B) y pre-fragilidad (C) mostraron mejores resultados. Seis de los nueve participantes que comenzaron con fragilidad física o pre-fragilidad (66,7%) revirtieron esta condición tras la intervención. Además, el 33% de los participantes que fueron incapaces de realizar las pruebas funcionales (sentarse, levantase y caminar) al inicio, pudieron completarlas tras la intervención. Estos importantes beneficios en tan poco tiempo (4 semanas) podrían estar relacionados con tres elementos clave: individualización del programa, frecuencia diaria y motivación del entrenamiento dirigido. En este estudio se determinaron los efectos de un programa de ejercicio multicomponente individualizado de 4 semanas (Vivifrail) sobre la fragilidad física y la discapacidad funcional en adultos mayores que viven en hogares de ancianos. Catorce personas institucionalizadas (edad 81,7 ± 9,7 años) se ofrecieron voluntarios para completar 4 semanas del programa de ejercicio individualizado Vivifrail (5 días a la semana) de acuerdo con su nivel inicial: A, discapacidad; B, fragilidad; C, pre-fragilidad y D, robusto. Los entrenamientos fueron dirigidos por educadores físico-deportivos titulados. Once participantes completaron las 4 semanas con niveles muy altos de asistencia (96%). La capacidad funcional (puntuación del SPPB) mejoró en todos los participantes (+46,6%, p < 0,001, ES = 0,79) y tests: levantarse de la silla (45,6% faster, p = 0,003, ES = 1,43), velocidad de marcha 4 m (19,3% faster, p = 0,033, ES = 0,38) y test Timed Up-and-Go (23,2% faster, p = 0,004, ES = 0,35). La discapacidad y sarcopenia disminuyeron significativamente (SARC-F, p = 0,026, ES = 0,59; Lawton index, p = 0,013, ES = 0,87). Las personas que empezaron con niveles de discapacidad (A), fragilidad (B) y pre-fragilidad (C) mostraron mejores resultados. Seis de los nueve participantes que comenzaron con fragilidad física o pre-fragilidad (66,7%) revirtieron esta condición tras la intervención. Además, el 33% de los participantes que fueron incapaces de realizar las pruebas funcionales (sentarse, levantase y caminar) al inicio, pudieron completarlas tras la intervención. Estos importantes beneficios en tan poco tiempo (4 semanas) podrían estar relacionados con tres elementos clave: individualización del programa, frecuencia diaria y motivación del entrenamiento dirigido. Neste estudo, foram determinados os efeitos de um programa individualizado de exercícios multicomponentes de quatro semanas (Vivifrail) sobre a fragilidade física e a incapacidade funcional em idosos residentes em casas de repouso. Quatorze indivíduos institucionalizados (idade 81,7 ± 9,7 anos) se voluntariaram para completar 4 semanas do programa de exercícios individualizado Vivifrail (5 dias por semana), de acordo com seu nível inicial: A, incapacidade; B, fragilidade; C, pré-fragilidade e D, robusto. Os treinamentos foram conduzidos por educadores físicos e esportivos certificados. Onze participantes completaram as 4 semanas com níveis muito altos de participação (96%). A capacidade funcional (escore SPPB) melhorou em todos os participantes (+46,6%, p < 0,001, ES = 0,79) e testes: levantar da cadeira (45,6% faster, p = 0,003, ES = 1,43), velocidade de caminhada 4m (19.3% faster, p = 0,033, ES = 0,38) e 6 m (19,3% faster, p = 0,033, ES = 0,38) e teste Timed Up and Go (23,2% faster, p = 0,004, ES = 0,35). Incapacidade e sarcopenia diminuíram significativamente (SARC-F, p = 0,026, ES = 0,59; Lawton index, p = 0,013, ES = 0,87). Pessoas que iniciaram com níveis de incapacidade (A), fragilidade (B) e pré-fragilidade (C) apresentaram melhores resultados. Seis dos nove participantes que iniciaram com a condição física ou pré-fragilidade (66,7%) reverteram essa condição após a intervenção. Além disso, 33% dos participantes que não conseguiram realizar os testes funcionais (sentar, levantar e andar) na linha de base, conseguiram concluí-los após a intervenção. Esses importantes benefícios em tão pouco tempo (4 semanas) podem estar relacionados a três elementos principais: individualização do programa, frequência diária e motivação do treinamento direcionado.