The results of the appearance of the novel coronavirus meant for many States, the application of restrictive measures of constitutionally protected rights and freedoms, with the aim -preliminarily- of protecting the health and integrity of people. Thus, a real “emergency legal framework” was created, with restrictions on interpersonal contact, and other daily situations in the life of any society.
 Italy stood out for being the first country where COVID-19 attacked with particular virulence. The first steps of the government at the end of January 2020 were aimed at preventing the entry of people from China, and soon after, put in place much more restrictive measures as the number of deceased patients increased. However, to some extent, all the imposed restrictions seemed to have been a price to be paid in order to protect human health.
 
 Los resultados de la aparición del novel coronavirus significó para muchos Estados, la aplicación de medidas restrictivas de derechos y libertades constitucionalmente tutelados, con el objeto -preliminarmente- de proteger la salud e integridad de las personas. Así, se dio paso a la creación de un verdadero “sistema jurídico de emergencia”, con restricciones al contacto interpersonal, situaciones por demás cotidianas en la vida de cualquier sociedad.
 Italia se destacó por ser el primer país donde el COVID-19 atacó con particular virulencia. Los primeros pasos del gobierno a finales de enero de 2020 tuvieron el objetivo de impedir el ingreso de personas provenientes de China, para poco después disponer medidas mucho más restrictivas a medida que el número de pacientes fallecidos aumentaba. Sin embargo, en algún punto, las restricciones impuestas se presentan como el precio que se debió pagar a cambio de la salud humana.
Read full abstract