Franco em Coimbra ou a construção do relato oficial na cultura espanhola

Antonio Sáez Delgado

doi:10.14195/2183-847x_10_33

Abstract

No mês de outubro de 1949, o caudilho Francisco Franco fez uma viagem a Portugal, única visita oficial que realizou a outro país durante a sua ditadura. No percurso dessa viagem, o espanhol recebeu o Doutoramento honoris causa em Direito pela Universidade de Coimbra, num ato cheio de simbolismos, em que esteve acompanhado por um importante trio de escritores espanhóis afins ao regime: Eugenio Montes, Wenceslao Fernández Flórez e Ernesto Giménez Caballero. Eles contribuíram notavelmente à construção da narrativa oficial daquela visita, num interessante processo de legitimação histórica do general espanhol perante a opinião pública internacional, construído num tempo em que Espanha estava isolada politicamente.

Highlights

650 | ANTONIO SÁEZ DELGADO espanhóis afins ao regime: Eugenio Montes, Wenceslao Fernández Flórez e Ernesto Giménez Caballero
Incluso en el archivo histórico de la filmoteca de Radiotelevisión Española se conserva un magnífico documento gráfico del evento en forma de imágenes documentales,1 en las que se pone de manifiesto todo el aparato oficial al servicio de la recepción a Franco, así como la adhesión que los lisboetas prestaron al acto, llenando las calles de la ciudad y poblando sus balcones de banderas españolas
En unas páginas en las que también figuran, entre otros, Ernesto Giménez Caballero (“España, Portugal y el mundo hispánico”) y Wenceslao Fernández Flórez (“Una hora en Fátima”), todos ellos parte de la comitiva que acompañó en aquellos días al caudillo, Montes rememora los días en que visitó con José Antonio Primo de Rivera la Universidad de Heidelberg, y establece el paralelo con “la Coimbra, por cuyo Mondego reman los suspiros de Camoens, cuyas rúas pinas subía a saltitos, como un pájaro, el padre Suárez, y cuyas torres revuelan los versos de Antonio Nobre, o repican bronce en loor de Francisco Franco.” (Montes, 1949: 8) En unas páginas encendidas de fragor, el escritor ensalza el valor de la Universidad de Coimbra como elemento legitimador del caudillo fuera de toda sospecha: Pero no todos los doctorados significan lo mismo