Abstract

La prohibición docente a la que fue acreedor Martin Heidegger entre 1946 y 1951 fue uno de los resultados de su compromiso con el nacionalsocialismo, principalmente al asumir la rectoría de la Universidad de Friburgo de 1933 a 1934. La situación con la propia universidad y su experiencia docente de más de 30 años lo lleva a sugerir modos alternos en la docencia que concluyen en “ejercicios de lectura” realizados en el domicilio del filósofo entre 1950 y 1951. Esta experiencia docente es motivo de múltiples reflexiones heideggerianas sobre una idea de enseñanza que correspondiera a su pensar y a lo cual se alude como “taller” (Werkstatt) en tanto oficio artesanal (Handwerk). El presente artículo destaca la relevancia de esta propuesta a partir de su implementación en 1950 con los ejercicios sobre el problema de la causalidad.

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