Las plantaciones forestales han sido tradicionalmente desarrolladas a partir de material de propagación de origen seminal. Sin embargo, las principales especies plantadas en el mundo se pueden propagar vegetativamente, por lo que las posibilidades para el desarrollo de la silvicultura clonal son crecientes. El cultivo de Salicáceas se realiza con estacas o guías, por lo que las plantaciones son 100% producidas bajo un esquema de silvicultura clonal. Además, en el Delta del Río Paraná los rodales se instalan como bloques monoclonales y el clon Populus deltoides ‘Australiano 129/60’ es el más difundido, definiendo una matriz productiva con una estrecha diversidad genética. Esto determina que el sistema sea menos estable y trae aparejado un riesgo productivo ante la aparición de condiciones de estrés biótico o abiótico. En consecuencia, el modelo de silvicultura monoclonal presenta algunas desventajas no solo desde el punto de vista ecológico, sino también productivo. A partir de la posibilidad que brindan las especies forestales, que presentan una gran variabilidad tanto intra como interespecífica, es posible pensar en combinación de clones para aumentar la diversidad genética de las plantaciones. Las plantaciones clonales mixtas pueden favorecer a la disminución de los impactos de las actividades productivas en el ambiente, distribuir espacialmente la demanda de nutrientes del suelo, aumentar la diversidad genética y mejorar los índices de rendimiento del rodal. El objetivo de esta revisión es analizar los antecedentes de silvicultura clonal y plantaciones mixtas como base para la propuesta de alternativas silviculturales para las Salicáceas del Delta del Paraná.