Molt patterns are poorly understood in most large bird species; however, they are of paramount importance in the development of surveys in which age is a key parameter. From 2000 to 2011, we studied the body condition and molt patterns of 214 Griffon Vultures (Gyps fulvus) in Spain. Adult Griffon Vultures (“griffons”) demonstrated a poor body condition in winter during the incubation period, which then improved after hatching. Conversely, subadults were fairly uniform throughout the year, with their condition slightly inferior to that of adults throughout the year (except during the incubation period). The molt period lasted from April to December, ending in winter. Juveniles started their first molt in May of their second calendar year, beginning from the innermost primary (pp1) and proceeding outwards. Later, in midsummer, some individuals molted secondaries (only 17% of secondaries were molted in the first molt season) beginning at four foci: from the innermost (ss25) outwards, the outermost (ss1) and ss5 or ss6 inwards, and centrifugally from ss12. In the third calendar year, griffons continued molting primaries outwards in an orderly fashion and two new foci appeared in secondaries, apparently at ss6 and ss15. Most juvenile feathers were completely molted by the fourth calendar year, although some fifth-calendar-year griffons had retained juvenile secondaries. Subsequently, adults did not show a consistent molt pattern, but had a high degree of asymmetry between the two wings. Some quills were molted more often than others and this led us to hypothesize that adult griffons might molt quills on demand.El conocimiento sobre los patrones de muda de la mayoría de las grandes aves es aún escaso, sin embargo resulta de fundamental importancia para desarrollar investigaciones en las que la determinación de la edad es clave. Entre 2000 y 2011 estudiamos la condición corporal y el patrón de muda de 214 individuos de Gyps fulvus en España. Los buitres adultos mostraron una condición corporal baja en invierno, durante el periodo de incubación, la cual mejoró tras el nacimiento de los pollos. Por el contrario los sub-adultos mantuvieron una condición corporal uniforme a lo largo del año, un poco más baja que los adultos a lo largo del año, exceptuando el periodo de incubación. El periodo de muda duró desde abril hasta diciembre, finalizando en el invierno. Los juveniles comenzaron su primera muda en mayo de su segundo año de calendario, iniciándola desde las plumas primarias más internas (pp1) hacia fuera. Después, a mediados del verano, algunos jóvenes mudaron las plumas secundarias (sólo el 17% de las secundarias fueron mudadas en la primera sesión de muda), comenzando en cuatro focos, desde la más interna (ss25) hacia fuera, desde la más externa (ss1), desde la ss5 o ss6 hacia dentro y centrífugamente desde las ss12. En el tercer año calendario, los buitres continuaron la muda de las primarias de forma ordenada hacia fuera y aparecieron dos focos nuevos en las secundarias, en ss6 y ss15. Para el cuarto año calendario la mayoría de las plumas juveniles estuvieron completamente mudadas, aunque algunos buitres del quinto año aún presentaban secundarias juveniles retenidas. Tras esto, los adultos no mostraron un patrón consistente de muda, con un alto grado de asimetría entre ambas alas. Algunas rémiges fueron mudadas más frecuentemente que otras, lo que nos permite hipotetizar que los buitres adultos podrían mudar las rémiges cuando fuera necesario.