El tratamiento del infarto agudo de miocardio ha evolucionado notablemente en las últimas tres décadas. Actualmente están establecidas con total nitidez las ventajas del tratamiento de reperfusión en cuanto a reducción de la morbimortalidad en una enfermedad tan prevalente en los países desarrollados. Si las diferentes opciones de reperfusión, farmacológica o mecánica, se aplican y especialmente si es precozmente desde el inicio de los síntomas, la mortalidad del infarto de miocardio puede ser inferior al 5%, cifra impensable hace tan sólo unos años. La intervención coronaria percutánea primaria es el método de reperfusión ideal. Sin embargo, desde una visión comunitaria y a la vista de la extensión del territorio y los tiempos de acceso desde el inicio de los síntomas al contacto con el sistema sanitario, así como al centro intervencionista, la reperfusión farmacológica y el traslado simultáneo para realizar intervención coronaria percutánea de rescate, si procediera, pueden ser una opción complementaria, con resultados no inferiores a los de la intervención coronaria percutánea primaria, en caso de que se la considerara como única opción. Navarra es una comunidad relativamente extensa (10.391 km2), con tres centros hospitalarios públicos: un centro con unidad coronaria y cardiología intervencionista, en el Complejo Hospitalario de Navarra en Pamplona, y dos hospitales comarcales, Estella y Tudela, ubicados a 50 y 90 km del centro intervencionista. Estratégicamente, el objetivo es reperfundir al mayor número de pacientes que presenten un infarto de miocardio con elevación del ST. Si es en el área de Pamplona-Pamplona Norte, siempre intervención coronaria percutánea primaria; si es en los dependientes de los hospitales comarcales de Estella y Tudela, estrategia invasiva o farmacoinvasiva en función de la suma de tiempos desde el inicio de los síntomas hasta el contacto con el sistema sanitario, más el tiempo teórico de traslado al centro intervencionista de Pamplona. Este tipo de estrategia combinada, con protocolos bien definidos, en una comunidad como la de Navarra, con peculiaridades urbanas y rurales, se muestra muy eficiente y su modelo, dentro de las dificultades, es de aplicación sencilla. The treatment of acute myocardial infarction has advanced considerably over the last three decades. Today, the benefits of reperfusion therapy are abundantly clear: it can reduce morbidity and mortality in a disease that has a very high prevalence in developed countries. If the various reperfusion treatments are used early after symptom onset, mortality due to myocardial infarction may be less than 5%, a level that was unthinkable just a few years ago. Primary percutaneous coronary intervention is the ideal reperfusion method. However, for the community as a whole in a region where distances are large and there may be a lengthy delay between symptom onset and hospital admission, pharmacological reperfusion with simultaneous transport for rescue percutaneous coronary intervention, if warranted, may be an alternative, and outcomes are not inferior to those of primary percutaneous coronary intervention when this is the only option. In the region of Navarre in Spain, a relatively extensive area (i.e. 10 391 km2) is covered by three public hospitals: the Complejo Hospitalario de Navarra in Pamplona and two district hospitals in Estella and Tudela, located 50 km and 90 km, respectively, from the interventional cardiology service in Pamplona. Strategically, the goal is to provide reperfusion therapy for the maximum possible number of patients with ST-elevation myocardial infarction. Primary percutaneous coronary intervention is always performed in patients from the area around Pamplona and North Pamplona. In areas served by the district hospitals in Estella and Tudela, either invasive treatment or the combination of pharmacological and invasive therapy may be used depending on the sum total of the time between symptom onset and first contact with the health system plus the theoretical transfer time to the interventional cardiology service in Pamplona. The use of this combination treatment strategy, based on well-defined protocols, in a region like Navarre, which is characterized a mixture of urban and rural communities, appears to be very effective and, within its limitations, the program was simple to implement.