The Concertación and Homelessness in Chile

Abstract

Housing has been a persistent problem in Chile. Concertación governments have sought to address the housing problem through a continuation of the neoliberal policies established by the dictatorship under Pinochet, emphasizing housing as commodity rather than a right. A study of housing policies under the Concertación reveals improvements in the quantitative supply with increased spending. Yet these neoliberal housing programs stratify residents into categories of poverty in which the poorest residents compete against one another to access subsidies and find housing. These programs prevent citizens from acting collectively to demand policy changes; instead housing is treated as a problem of poor families who must seek to resolve their situation on the individual level by enrolling in subsidy programs. As a result, the unequal distribution of housing in Chile continues, and the poor end up in low-quality housing in economically segregated neighborhoods far from jobs and services. La vivienda ha sido un problema constante en Chile. Los gobiernos de Concertación han intentado atender este problema a través de la continuación de una serie de políticas neoliberales establecidas durante la dictadura de Pinochet, las cuales presentan la vivienda como mercancía más que un derecho. Un estudio de las políticas de vivienda bajo la Concertación revela mejoras en la cantidad de oferta a raíz de un gasto mayor. Sin embargo, estos programas neoliberales de vivienda estratifican a los residentes en categorías de pobreza dentro de las cuáles lo más pobres deben competir unos contra otros para tener acceso a los subsidios y encontrar casa. Estos programas evitan que la ciudadanía actúe de manera colectiva y exija cambios en las políticas. En lugar de esto, la vivienda se trata como un problema de las familias pobres, las cuales deben encontrar una solución individual a su situación enrolándose en los programas de subsidio. El resultado es que Chile continúa con una distribución desigual de la vivienda y los pobres acaban en casas de mala calidad en vecindades económicamente marginales lejos de sus trabajos y servicios.