Abstract
Los servicios de planificación familiar empezaron a desarrollarse oficialmente en Costa Rica a finales de la década de 1960, durante sus primeros años de existencia fueron impulsados por organizaciones privadas en conjunto con instituciones estatales. Con el gobierno de Rodrigo Carazo, a partir de 1978, el programa fue criticado en el marco de la formulación de una política de población. Durante la década de 1980 la planificación familiar fue objeto de debate público y los medios de comunicación se configuraron en plataformas que permitieron el intercambio de opiniones a favor y en contra. Este artículo tiene por objetivo analizar el despliegue discursivo que se dio en esos años, a partir de fuentes periodísticas y documentos estatales. Entre las principales críticas hacia estos servicios estaba la idea de que en el país se consolidaba una política antinatalista, la cual seguía los lineamientos de organizaciones extranjeras, mientras que los sectores que apoyaron la planificación familiar enfatizaron que siempre se trató de un derecho y un servicio voluntario. Las discusiones se transformaron en 1994 cuando se desarrolló la Conferencia Internacional sobre Población en El Cairo, destacándose posiciones a favor y en contra de su Plan de Acción. Los ejes del debate global sobre población viraron hacia otros aspectos como los derechos reproductivos y las relaciones entre personas del mismo sexo. Se concluye que, para entender las coordenadas de los debates actuales en torno a los sectores autodenominados “provida” y las luchas por la autodeterminación de los cuerpos, es necesario una visión histórica que tome en cuenta estos antecedentes.
Published Version
Talk to us
Join us for a 30 min session where you can share your feedback and ask us any queries you have
Similar Papers
More From: Anuario Centro de Investigación y Estudios Políticos
Disclaimer: All third-party content on this website/platform is and will remain the property of their respective owners and is provided on "as is" basis without any warranties, express or implied. Use of third-party content does not indicate any affiliation, sponsorship with or endorsement by them. Any references to third-party content is to identify the corresponding services and shall be considered fair use under The CopyrightLaw.