<p class="p1">La producción y calidad del cultivo del ajo criollo (<em>Allium sativum</em>) se ven limitadas por diversas enfermedades de origen fungoso y bacterial, que llevan al productor a aplicar estrategias de control químico y en algunos casos abandonar la actividad por un incremento en las pérdidas. El control biológico es una estrategia útil para combatir este tipo de microorganismos. El objetivo de esta investigación consistió en evaluar el antagonismo in vitro de <em>Trichoderma </em>sp. y <em>Bacillus subtilis </em>contra tres de los principales patógenos del ajo: <em>Sclerotium cepivorum</em>, <em>Penicillium </em>sp. y <em>Pseudomonas marginalis. </em>Las especies mencionadas se aislaron e identificaron con pruebas bioquímicas y claves taxonómicas respectivamente y se determinó su actividad antagónica y efecto inhibitorio utilizando el crecimiento en platos duales. La cepa de <em>B. subtilis </em>mostró un potencial con valores bajos de PICR: 14,087 ante <em>S. cepivorum </em>y 3,328 ante <em>Penicillium </em>sp., por lo que se clasifica como un mal biocontrolador. Por su parte, <em>Trichoderma </em>presentó un potencial muy alto, con valores de PICR de 40,210 frente a <em>S. cepivorum </em>y de 45,034 ante <em>Penicillium </em>sp., lo que indica que es un muy buen controlador. Los resultados apoyan el potencial de las cepas de <em>Trichoderma </em>sp. como agentes de control biológico frente a la pudrición causada por <em>Penicillium </em>del ajo, la bacteriosis por <em>P. marginalis </em>y la pudrición blanca por <em>S. cepivorum. </em>No así <em>Bacillus subtilis, </em>pues la cepa aislada demostró poco potencial como biocontrolador.</p>